Ficción y realidad es el resultado del interés académico por la escritura, y desempeña una doble función: por un lado, abre un amplio espacio para que los propios escritores expresen sus puntos de vista sobre ese dilema tan actual y arrinconado que parece no tener un final o una conclusión definitiva. Y por otro, cede la palabra a profesores, críticos, investigadores y estudiantes que entran y salen a la escritura de Elena Poniatowska, Héctor Aguilar Camín, Juan Villoro, Hernán Lara Zavala, Roberto Bolaño, y establecen un código para entender y comprender sus universos narrativos.
El tema puesto en la balanza, la ficción y la realidad, unió criterios que enriquecieron los matices que esa dicotomía abarca en varios planos analíticos. No hay uniformidad de ideas, pensamientos y afirmaciones, sino diversidad en la que se cruzan sus voces. Y ese tejido forma una estructura crítica, narrativa, a veces anecdótica, llena de emociones y vivencias. Las voces establecen un diálogo con la comunidad universitaria y así llegan a ciertas conclusiones decisivas para entrar mejor y tal vez más seguros en la escritura que se está produciendo en México y en otros países. Ofrecen pautas, momentos de serenidad y toma de conciencia frente a los desafíos que el mundo globalizado impone al lenguaje.